Estuvimos hace unos días en este bonito municipio de las Cinco Villas en Zaragoza. Nos sorprendieron gratamente sus paisajes, el municipio por la cantidad de monumentos con que cuenta (con visitas guiadas todos los días) y sobretodo, el trato recibido en la casa El Caserón del Remedio. Javi y sus padres, se nota que se toman muy en serio el turismo rural. Sus instalaciones cuidadas hasta el más mínimo detalle, unos desayunos.... que ni os cuento (no dejéis de probar las tortas de manteca!) y un asesoramiento para ir directos al grano sin perderse nada, digno del mejor de los anfitriones. La conexión wi-fi gratuita, fué todo un detalle.
Contramos una excursión en 4x4, Inma, es un encanto, nos descubrió parajes que nunca hubiésemos conocido sin llevarnos ella.
En resumen, para repetir, pero con más tiempo. Un alojamiento de turismo rural que recomiendo!
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