Por la tarde la botarga aparece en el terraplén frente a la iglesia, gritando y saltando. La gente acude a comentar las diferencias con otros años. Baja y persigue a los niños mientras va de casa en casa reuniendo a las autoridades para ir a la iglesia. Durante el oficio, se queda fuera y persigue a las mozas que llegan; los niños se mofan de él y le insultan.
Luego se hace una hoguera frente al pórtico, mientras los mayordomos obsequian a la gente con un refresco. Después de la merendola, botarga y mozos saltan la hoguera. La botarga se revuelca en las cenizas y con ellas llena el cobijón. Sucio de tizne, persigue a las mozas para restregarse con ellas y arrojarles cenizas.
Por la noche la botarga recorre el pueblo, acentuando gritos y ruidos para atemorizar a la gente. Las persigue por las calles y golpea las puertas de las casas hasta altas horas.
¡Imaginen la escena, con las brasas iluminando el pueblo y sin luces por las calles, sin asfaltar!
Lar-ami
Lar-ami
No hay comentarios:
Publicar un comentario